El descenso de cañones en Huesca es una actividad completa: saltar, nadar en rápidos, rapelar… bajar el río por la cabecera esquivando los obstáculos y desafiando la naturaleza. Un verdadero aquapark en el que todes disfrutan superando los retos, y superándose.
A veces rapelando en medio de una cascada, a veces rapelando en el vacío, a veces saltando de 5, 9 o 12 metros de alto. A veces nadando en los rápidos, otras deslizando de un tobogán natural… el cañón es un aquapark natural que ofrece toda la diversión que se puede necesitar antes de volver a la realidad.
Descenso de Cañones en Huesca
Es una manera de descubrir la naturaleza bajo otro ángulo. Entrando hasta el fondo del cañón podemos observar cómo se relacionan los seres que habitan estos lugares tan atípicos. La fauna, pero también la flora sorprende en su forma de coexistir en un entorno tan peculiar. A veces jungla, a veces piedra, a veces flores… el paisaje asombra siempre en un cañón.
Lo más interesante quizás es sentirse tan insignificante, tener la sensación de ser un grano de arena en esta naturaleza tan fuerte e inmensa. Entramos en el cañón siendo una persona, salimos siendo otra.
Las corrientes, las rocas, los seres que lo habitan… todo nos recuerda hasta qué punto nos hemos alejado de la verdadera naturaleza salvaje. Es un viaje al centro de la tierra que deja huella en las memorias.
Los grupos de amiges, las familias o las parejas que se adentran en un cañón salen más unides, orgulloses de haber superado los retos, felices de haber visto la intimidad del río. Es una lección de humildad. Pero más aún, es una lección de vida. Permite aprender más sobre quienes somos, sobre nuestras capacidades, sobre nuestro entorno.
Diversión, ilusión y emoción, es lo que ofrece el cañón de forma ilimitada. Es una actividad de la que nadie se puede aburrir: según las temporadas todo cambia. Realizar un descenso de cañones en Huesca, verano, en primavera o en otoño ofrece paisajes totalmente diferentes y sensaciones nuevas.
Se pueden realizar tramos diferentes del cañón, se puede cambiar de cañón… hay mil maneras para que cada persona redescubra esta actividad tan impresionante.
Existen cañones con agua, pero también secos, según la época del año y las condiciones meteorológicas, el cañón seco o cañón multiaventura nos permite disfrutar «en seco» de bellos parajes rapelando, trepando, utilizando pasamanos, tirolinas, pasos de vía Ferrata. Lo convierte en la actividad perfecta para cuando el tiempo no nos permite realizar un cañón acuático.
¿Qué se necesita para disfrutar de esta actividad a lo grande? Un neopreno de 5 mm de grosor para mantener la temperatura corporal y proteger de las piedras. Un casco de escalada homologado que drena el agua, un arnés especial con sus dos cabos de anclaje o líneas de vida y un descensor junto con su mosquetón con cierre de seguridad.
Y el equipo común que consiste esencialmente en cuerdas, materiales de progresión (mosquetones, descensores adicionales), material de seguridad y el equipo de rescate (cordinos auxiliares, bloqueadores, botiquín de primeros auxilios, frontal, etc.).
¿Qué tenéis que traer? Zapatillas con una buena suela y que aguante el tobillo, bañador y un picoteo (botellita de agua y unos frutos secos, o tentempié ligero).
Los rápidos, las rocas, los toboganes… son elementos que jalonan el recorrido y ritman el descenso. El aquapark natural tiene todas las atracciones que puedes soñar. Además de estrechar lazos, el descenso de cañones en Huesca permite aprender más sobre las personas que nos rodean y sobre sus propias capacidades. Es una aventura que cambia la percepción de la vida y de las personas que participan.
¡Ven y disfruta a lo grande de una experiencia inolvidable con el descenso de cañones en Huesca, saltando, buceando y rapelando por el cauce del río!